domingo, 18 de abril de 2010

18 de abril. LEYENDAS URBANAS. No hay que llegar primero, sino saber llegar.

ÉDGAR LEDEZMA:

Cuando estaba de apostólico en el Centro vocacional del Ajusco en México siempre corríamos de la cancha de fúrbol rápido a las regaderas. Cuando llovía muchos resbalaban. Siempre me reía mucho de los que se caían hasta que me toco a mí..., y de espalda. Resbalé como cinco o seis metros. Fue gracioso pero sobre todo muy formativo para mí...

1 comentario:

  1. pues yo una mañana baje corriendo y se me olvido que habia redes de volleyball y me quede atorado 2 hermanos fuero a ayudarme jaja que buenos tiempos. VTR!!

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